ANALIZANDO UNA IDEA
Podemos conocer una idea intemporalmente, toda ella, pero pensarla en forma objetiva, es analizarla para extenderla en el universo tridimensional del tiempo y espacio. Para pensarla así, la divides y multiplicas en muchas condicionadas formas materiales y las pones en movimiento, para que formen parte de este universo físico de multicondicionadas formas en movimiento. Este proceso creativo requiere una técnica, pero el conocimiento y la inspiración no requieren técnica.
Recuerda siempre que Dios está creando su universo dando formas objetivas a tus imaginadas formas. Sin embargo debes concebir la idea de esas formas antes de empezar a edificarlas en tu imaginación. Entonces debes imaginarlas completamente antes de darlas a luz objetivamente. Cuando tu imaginada idea está suficientemente clara, entonces empieza a crearla, así sepas o no su técnica.
Aprende la técnica al hacerlo. La técnica es algo que tu cuerpo adquiere y cualquiera puede adquirir cualquier técnica, pero el conocimiento y la inspiración, tú no los adquieres. Tú ya lo tienes. Todo lo que necesitas hacer es despertarlo. Y para despertarlo, todo lo que necesitas es el deseo de despertarlo. En el momento que tengas el deseo y se lo haces saber a Dios, entonces empezarás a saber ese glorioso lenguaje de la Luz que tú mismo eres. La inspiración vendrá entonces a ti y en esa inspiración tu deseo está siendo satisfecho con el saber que es esa inspiración. El lenguaje de la Luz es sin palabras, pero es la esencia de la inteligencia. Tú mismo puedes poner la inteligencia en palabras, ya que las palabras son sólo una técnica. De igual manera cualquier forma que quieras darle, tú mismo, puedes traducir la esencia de ese divino lenguaje de Luz a la forma a través de cualquier medio, adquiriendo la técnica de ese medio. Eso es algo que tu cuerpo hace actuando solamente con tu voluntad. A través de tu voluntad comandas tu cuerpo a que exprese tu deseo. Tu cuerpo es sólo una máquina automática que debe ser manipulada a tu voluntad. Debe ser entrenado por tu voluntad para satisfacer cualquier técnica de expresión y puede tomar años entrenar tu cuerpo para que automáticamente obedezca tu voluntad.
Es por eso que lleva años de práctica para que un cuerpo se convierta un perfecto instrumento musical, o un instrumento que pinta, que escriba o que esculpe, con instrumentos que son meras extensiones del cuerpo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario